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Congregación Cuerpo y Sangre de Cristo

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Información Permanente

domingo, 29 de enero de 2017

MEDITACIÓN DE LA PALABRA PARA LA SEMANA DEL 29 DE ENERO DE 2017

LIBRO DE AGEO

La reconstrucción del Templo.

1
1 El año segundo del rey Darío, el día primero del sexto mes, fue dirigida la palabra de Yahvé, por medio del profeta Ageo, a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, y a Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, en estos términos: 2 Así dice Yahvé Sebaot: Este pueblo dice: «¡Todavía no ha llegado el momento de reedificar el Templo de Yahvé!» 3 (Dirigió entonces Yahvé la palabra, por medio del profeta Ageo, en estos términos:) 4 «¿Les ha llegado acaso el momento de habitar en casas artesonadas, mientras esta Casa está en ruinas? 5 Pues ahora, así dice Yahvé Sebaot: Presten atención a la situación en que se hallan. 6 Ustedes han sembrado mucho y cosechado poco; han comido, pero sin quitar el hambre; han bebido, pero sin apagar la sed; se han vestido, mas sin calentarse; y el jornalero ha metido su jornal en saco roto. 7 Así dice Yahvé Sebaot: Presten atención a la situación en que se hallan. 8 Suban a la montaña, traigan madera y reedifiquen el Templo; yo la aceptaré gustoso y me sentiré honrado, dice Yahvé. 9 Ustedes esperaban mucho, y bien poco es lo que hay. Y lo que metieron en casa yo lo aventé. ¿Por qué? —oráculo de Yahvé Sebaot— Porque mi Casa está en ruinas, mientras ustedes se cobijan cada uno en su casa. 10 Por eso, por culpa suya, los cielos han negado la lluvia y la tierra ha negado su producto. 11 Yo he convocado a la sequía sobre la tierra y sobre los montes, sobre el trigo, el mosto y el aceite, sobre todo lo que produce el suelo, sobre los hombres y el ganado, y sobre todos sus trabajos.»
12 Zorobabel, hijo de Sealtiel, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el Resto del pueblo escucharon la voz de Yahvé, su Dios, y las palabras del profeta Ageo, según la misión que Yahvé su Dios le había encomendado, y el pueblo tuvo miedo de Yahvé. 13 Entonces Ageo, el mensajero de Yahvé, habló así al pueblo, en virtud del mensaje de Yahvé: «Yo estoy con ustedes, oráculo de Yahvé.» 14 Y Yahvé movió el espíritu de Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, el espíritu de Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y el espíritu de todo el Resto del pueblo. Y vinieron y emprendieron las obras del Templo de Yahvé Sebaot, su Dios. 15 Era el día veinticuatro del sexto mes.


La gloria del Templo.

2
El año segundo del rey Darío, 1 el día veintiuno del séptimo mes, dirigió Yahvé la palabra, por medio del profeta Ageo, en estos términos: 2 Habla ahora a Zorobabel, hijo de Sealtiel, gobernador de Judá, a Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, y al Resto del pueblo, y diles: 3 ¿Quién queda entre ustedes que haya visto este Templo en su primer esplendor? Y ¿qué es lo que ven ahora? ¿Verdad que les parece que no existe? 4 ¡Pero ahora ten ánimo, Zorobabel, oráculo de Yahvé; ánimo, Josué, hijo de Josadac, sumo sacerdote, ánimo, pueblo todo de la tierra! —oráculo de Yahvé—. ¡A la obra, que estoy con ustedes —oráculo de Yahvé Sebaot—, 5 según el pacto que hice con ustedes cuando salieron de Egipto; y mi espíritu sigue en medio de ustedes: no teman! 6 Pues así dice Yahvé Sebaot: Dentro de muy poco tiempo sacudiré los cielos y la tierra, el mar y el suelo firme, 7 sacudiré todas las naciones; llegarán entonces los tesoros de todas las naciones, y yo llenaré de gloria este Templo, dice Yahvé Sebaot. 8 ¡Mía es la plata y mío el oro! —oráculo de Yahvé Sebaot—. 9 Grande será la gloria de este Templo, la del segundo mayor que la del primero, dice Yahvé Sebaot, y proporcionaré paz a este lugar —oráculo de Yahvé Sebaot—.

Consulta a los sacerdotes.

10 El día veinticuatro del noveno mes, el año segundo de Darío, dirigió Yahvé la palabra al profeta Ageo en estos términos: 11 Así dice Yahvé Sebaot: Pregunta a los sacerdotes sobre la Ley. Diles: 12 «Si lleva alguien carne sagrada en el halda de su vestido, y toca con su halda pan, guiso, vino, aceite o cualquier otra comida, ¿quedará ésta santificada?» Respondieron los sacerdotes: «No.» 13 Continuó Ageo: «Si alguien, que se ha hecho impuro con el contacto de un cadáver, toca alguna de esas cosas, ¿quedará impura?» Respondieron los sacerdotes: «Sí.» 14 Entonces Ageo siguió diciendo: «Así es este pueblo, así esta nación por lo que a mí respecta —oráculo de Yahvé—; todas sus tareas y lo que ofrecen aquí no es más que impureza»

Promesa de prosperidad agrícola.

15 Y ahora presten atención a partir de este día. Antes de empezar a construir el Templo de Yahvé, 16 ¿qué les pasaba? Que iban a un montón de grano en busca de veinte fanegas, y no había más que diez; que entraban en el lagar a sacar cincuenta cántaros, y no había más que veinte. 17 Yo castigué sus labores con tizón, añublo y granizo, pero ninguno se volvió a mí —oráculo de Yahvé—. 18 Presten, pues, atención a partir de este día (desde el día veinticuatro del noveno mes, día en que se echaron los cimientos del Templo de Yahvé, presten atención): 19 ¿hay grano ahora en el granero? Pues si ni la vid ni la higuera ni el granado ni el olivo producían fruto, desde este día yo los bendeciré.

Promesa a Zorobabel.

20 Yahvé dirigió la palabra por segunda vez a Ageo, el día veinticuatro del mes, en estos términos: 21 Habla a Zorobabel, gobernador de Judá y dile: Voy a sacudir los cielos y la tierra. 22 Volcaré los tronos de los reyes y destruiré el poder de los reinos paganos, volcaré los carros de guerra con sus aurigas, y serán abatidos caballos y caballeros, cada uno por la espada de su camarada. 23 Aquel día —oráculo de Yahvé Sebaot— te tomaré a ti, Zorobabel, hijo de Sealtiel, siervo mío —oráculo de Yahvé—, y te haré mi anillo de sello, pues tú eres mi elegido — oráculo de Yahvé Sebaot


V. Palabra de Dios
R. Te alabamos, Señor


domingo, 22 de enero de 2017

MEDITACION DE LA PALABRA PARA LA SEMANA DEL 22 DE ENERO DE 2017

EL APOCALIPSIS (2, 1-7)

I. Éfeso.


2    1 Al ángel de la iglesia de Éfeso. Escribe: Esto dice el que tiene las siete estrellas en su mano derecha, el que camina entre los siete candeleros de oro. 2 Conozco tu conducta: tus fatigas y tu paciencia; y que no puedes soportar a los malvados y que pusiste a prueba a los que se llaman apóstoles sin serlo y descubriste su engaño. 3 Tienes paciencia, y has sufrido por mi nombre sin desfallecer. 4 Pero tengo contra ti que has perdido tu amor de antes. 5 Date cuenta, pues, de dónde has caído; arrepiéntete y vuelve a tu conducta primera. Si no, iré a ti y cambiaré de su lugar tu candelero, si no te arrepientes. 6 Tienes en cambio a tu favor que detestas el proceder de los nicolaítas, que yo también detesto. 7 El que tenga oídos, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias: al vencedor le daré a comer del árbol de la vida, que está en el Paraíso de Dios.

V. Palabra del Señor
R. Gloria a ti, Señor Jesús






sábado, 14 de enero de 2017

LIBRO DE LOS SALMOS-SALMO 1

LIBRO DE LOS SALMOS

SALMO 1

Los dos caminos

1 Feliz quien no sigue consejos de malvados
ni anda mezclado con pecadores
ni en grupos de necios toma asiento,
2 sino que se recrea en la ley de Yahvé,
susurrando su ley día y noche.
3 Será como árbol plantado entre acequias,
da su fruto en sazón, su fronda no se agosta.
Todo cuanto emprende prospera:

4 pero no será así con los malvados.
Serán como tamo impulsado por el viento.
5 No se sostendrán los malvados en el juicio,
ni los pecadores en la reunión de los justos.
6 Pues Yahvé conoce el camino de los justos,
pero el camino de los malvados se extravía.



Gloria al Padre, Gloria al Hijo y Gloria al Espíritu Santo.